Jinks
V.I.P.
Los populares preparan una reforma estructural del sistema sanitario
Ana Pastor expresó en voz alta lo que probablemente sean las líneas esenciales del programa sanitario del PP, que ayer desgranó en Barcelona ante un centenar de empresarios catalanes. Una de ellas es que los populares derogarán la ley del aborto, si llegan al Gobierno, una norma que tienen recurrida ante el Tribunal Constitucional. Pastor no tiene dudas. La considera «injusta e innecesaria», y cree que su aprobación no era una prioridad en España. «Nadie la pedía», aseguró.
La exministra de Sanidad durante el Gobierno de Aznar anunció que el PP prepara «una revolución en materia sanitaria», que no incluirá recortes, pero si una gran reforma estructural y de la gestión de los recursos humanos.
Uno de los puntos básicos de este nuevo modelo supondrá un cambio en la atención primaria y hospitalaria. Los centros sanitarios tendrán «horarios flexibles» y se dotará de «autonomía de gestión» a los ambulatorios, «a cambio de responsabilidad» y un nuevo sistema retributivo, que prime «al que hace mucho y bien, frente al que hace poco y mal», señaló en declaraciones recogidas por Efe.
Pastor también insinuó la posibilidad de que las farmacias amplíen sus competencias y puedan realizar también atención domiciliaria para aliviar la sobrecarga de los centros de atención primaria. Además, prometió actuar sobre la política farmacéutica para dotar a este sector de «un mínimo de ocho años de estabilidad», incentivando la innovación y no rebajando los precios de los fármacos, «porque esto genera confusión».
No al copago
Tras el debate abierto meses antes del anuncio electoral, Pastor quiso cerrar en Barcelona la postura del PP sobre el copago. No lo habrá, dijo, «porque no se puede imponer a un diabético que no ha elegido su enfermedad». En cambio, apostó por unificar la cartera de servicios sanitarios de las comunidades autónomas para que todos los ciudadanos puedan tener la misma atención.
Fuente: Lavozdegalicia
Ana Pastor expresó en voz alta lo que probablemente sean las líneas esenciales del programa sanitario del PP, que ayer desgranó en Barcelona ante un centenar de empresarios catalanes. Una de ellas es que los populares derogarán la ley del aborto, si llegan al Gobierno, una norma que tienen recurrida ante el Tribunal Constitucional. Pastor no tiene dudas. La considera «injusta e innecesaria», y cree que su aprobación no era una prioridad en España. «Nadie la pedía», aseguró.
La exministra de Sanidad durante el Gobierno de Aznar anunció que el PP prepara «una revolución en materia sanitaria», que no incluirá recortes, pero si una gran reforma estructural y de la gestión de los recursos humanos.
Uno de los puntos básicos de este nuevo modelo supondrá un cambio en la atención primaria y hospitalaria. Los centros sanitarios tendrán «horarios flexibles» y se dotará de «autonomía de gestión» a los ambulatorios, «a cambio de responsabilidad» y un nuevo sistema retributivo, que prime «al que hace mucho y bien, frente al que hace poco y mal», señaló en declaraciones recogidas por Efe.
Pastor también insinuó la posibilidad de que las farmacias amplíen sus competencias y puedan realizar también atención domiciliaria para aliviar la sobrecarga de los centros de atención primaria. Además, prometió actuar sobre la política farmacéutica para dotar a este sector de «un mínimo de ocho años de estabilidad», incentivando la innovación y no rebajando los precios de los fármacos, «porque esto genera confusión».
No al copago
Tras el debate abierto meses antes del anuncio electoral, Pastor quiso cerrar en Barcelona la postura del PP sobre el copago. No lo habrá, dijo, «porque no se puede imponer a un diabético que no ha elegido su enfermedad». En cambio, apostó por unificar la cartera de servicios sanitarios de las comunidades autónomas para que todos los ciudadanos puedan tener la misma atención.
Fuente: Lavozdegalicia