usuaria2010
Experto
Un postre muy típico norteamericano que se prepara rápidamente y se mantiene jugoso varios días si se guarda tapado. Así puedes degustarlo para desayunar, merendar o siempre que te apetezca.
No dejes de probar esta receta, tu casa se llenará de un delicioso aroma a plátano y seguro que te costará esperar a que se enfríe para comerlo. Se toma con un vaso de leche o café, con mantequilla normal o de cacahuetes -así se consume en Estados Unidos-, aunque para mi gusto ya está suficientemente dulce y rico sin nada.
Ingredientes:
2-3 plátanos maduros o incluso pasados
1/3 de vaso de mantequilla derretida
1 huevo
3/4 de vaso de azúcar (mejor moreno)
1'5 vasos de harina
1 cucharadita de bicarbonato
Pizca de sal
Vainilla y canela al gusto
2 barritas de 20 g de chocolate negro para postres
Un puñado de nueces peladas
Preparación:
Calentamos el horno a 175 ºC y engrasamos el molde con un poco de mantequilla. Machacamos los plátanos con un tenedor en un bol grande. Mezclamos este puré con la mantequilla derretida, después le añadimos el huevo batido, azúcar, vainilla y canela, y removemos bien.
Espolvoreamos la sal y el bicarbonato por encima, mezclamos de nuevo y, finalmente, agregamos la harina cpn suavidad. No hay que mover demasiado, en cuanto se disuelva la harina la masa base de nuestro 'banana bread' está lista.
Sólo falta añadir los frutos secos y el chocolate si nos gusta. En mi caso he hecho el pan de plátano al estilo más clásico, con virutas de chocolate hechas con un cuchillo (¡es muy fácil!) y unas nueces picadas. Pero las posibilidades son infinitas: chocolate blanco y frambuesas, chocolate negro y pepitas de calabaza, arándanos secos y trozos de cookies... ¡que vuele la imaginación!
Vertemos la masa en el molde y horneamos unos 40-50 minutos. Comprobamos que está hecho con un palillo de dientes: si sale seco es que está listo.
